SI MI PADRE VIVIERA HOY!

Al orar muy de mañana pensando que hoy es primero de junio, y es la fecha que nació mi padre, lo primero que siento es gratitud por los años felices que viví con el, jugué con el y sentí su amor; segundo, me invade tristeza, por los años que el vivió lejos de mí con gran indiferencia a mis necesidades básicas y a contarme de sus padres y hermanos que no se nada; tercero, siento nostalgia por los años que ya no está en este mundo y no tuvimos tiempo para restaurar nuestro amor como hija y padre, y me pregunto, si mi padre viviera hoy, que haría yo por el.

Soñar no cuesta nada, así que en el día del cumpleaños de mi Padre le doy rienda suelta a mi imaginación, inventando el padre que quisiera haber tenido y la hija que yo pudiera haber sido. Imaginando que no hubieran fronteras ni distancias, que no hubieran separaciones, peleas, ni divorcios, que no hubieran guerrillas, ni violencias. Imaginando que el amor a Dios lo hubiera transformado en el hombre de Dios que el pretendía ser y su amor por mi lo hubiera hecho el padre responsable por el bienestar de sus hijos primero y luego por las comunidades.

Si mi Padre viviera hoy, yo lo llamaría muy temprano en la mañana como recuerdo que el solía levantarse y tal vez él tendría un iPhone para responder feliz a mi llamada, claro está que, me respondería después de comprar el periódico del día. Por que aunque hubieran las televisiones más sofisticadas y de la mas alta definición, estoy segura que esas noticias no le robarían al él, el deleite de leer sentado, con las piernas cruzadas, en su silla favorita, con una taza de te natural para disfrutar hasta las letras mas pequeñas de sus periódicos.

Si mi Padre viviera hoy, me gustaría celebrarle su cumpleaños creo que ochenta y cinco, tal vez lo invitaría a una cita, a desayunar solo conmigo, para oírlo contarme las historias que a la edad que tengo me gustaría saberlo por el mismo. Las mas bellas memorias que tengo de él es jugando a la cocinita, dándole cosquillas y cuando el me llevaba a celebrar mis buenas calificaciones de la escuela, en algún lugar comiendo solos y haciéndome sentir especial y llevándome de la mano por la calle dándome la seguridad de su presencia.

Si mi Padre viviera hoy, yo le cantaría Feliz Cumpleaños con mi guitarra y oraría por el como oro por tantas personas, pero hacerlo por el, sería un placer desconocido. Yo recuerdo sus oraciones y lecturas de la Biblia, pero el nunca oyó las mias. Me gustaría haberle planchado una camisa, lustrado sus botas, hacerle una basta a un pantalón nuevo. Seguro que él también me hubiera pedido la guitarra y me hubiera dicho: “déjame ver si mis dedos todavía pueden sacar las melodías que nunca toque para ti”, pero lo hice, cuando estaba solo y te extrañaba.

Si mi Padre viviera hoy, de seguro ya estuviera enfocado en su nueva familia como me lo dijo en la carta ultima que me escribió poco tiempo antes de que el terrorismo acabara con su vida. El me dijo: “hija no he sido un buen padre contigo y tus hermanos, pero ahora que voy a cumplir sesenta años y si no salgo elegido como alcalde del pueblo, he decidido dejar mi lucha social y la política y dedicarme a mis cuatro hijos menores”. ¡Cómo lamento por tantos hijos que quedaron huérfanos, sin padres por el enfrentamiento de guerrillas y policías en Perú!!

Si mi Padre viviera hoy, me gustaría darle muchos besos y abrazos, me gustaría lavarle los pies y cortarle las uñas. Me gustaría asegurarle una vez mas que la carta de perdón que nos enviamos hace 30 años atrás, fue suficiente para sanar nuestros corazones dolidos por el abandono y el silencio. Estoy segura que su rostro reflejaría la dicha del perdón, sus ojos pequeños mirarían en grande a sus hijos y nietos alrededor. Oh mi padre amado! se llamaba Angel y el cielo le celebra hoy , pero si tu tienes un padre vivo, ámalo, búscalo, perdónalo y celébralo.
Clotilde Julca  
Junio 1, 2017

Clotilde Julca